Extrañas criaturas han salido por mi boca,

ahora creo que viven en mi oído izquierdo,

a veces me murmuran cosas,

desean que me corte

se excitan con mi lamento

con mi sangre correr.

Son como dos pequeñas personillas.

En ocasiones gimen por las noches,

gemidos de sufrimiento.

Al parecer uno de ellos enfermó gravemente,

me esta afectando,

ya eran parte de mi sistema,

este calvario no me deja dormir en paz,

mi cabeza va explotar.

En una ocasión uno de ellos con tono dolorido me dijo:

“La muerte se acerca a mi y mi compañero, con tanto dolor, tormento, ya no te preocupes por nada, tu vendrás con nosotros”

De inmediato el miedo me invadió, pero a medida que pasaban las horas esa angustia se convirtió en una paz inexplicable, es mi momento de ser feliz.

Por fin habrá descanso

Silencio.

(autor: Paloma Díaz)